El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, tomó la decisión de suspender un acto político que tenía previsto realizar el sábado en Mar del Plata. La medida fue tomada en medio de una ola de inseguridad que ha afectado a la ciudad y a la provincia en general.
El acto, que debía llevarse a cabo frente a la costa de Mar del Plata, tenía como objetivo mostrar el poder político de Axel Kicillof junto a los intendentes que apoyan su figura y sus seguidores. La decisión de suspender el acto se tomó tras el reciente fallecimiento de Matías Paredes, un joven de 26 años que fue baleado por efectivos de la Policía Bonaerense durante una confusa persecución.
Según las investigaciones, los policías habrían confundido a Paredes con el asesino del kiosquero Cristian Velázquez, quien había sido víctima de un homicidio en ocasión de robo.
Este trágico incidente, que se investiga como un caso de «gatillo fácil», generó una fuerte conmoción en la comunidad y llevó a Kicillof a tomar la decisión de suspender el acto por «respeto y empatía con la familia».
La situación de inseguridad en Mar del Plata y en otras partes de la provincia ha sido un tema recurrente en los últimos días. El presidente Javier Milei y sus seguidores han criticado duramente la gestión de Kicillof en materia de seguridad, acusándolo de no haber tomado las medidas necesarias para garantizar la protección de los ciudadanos.
Esta polémica se intensificó aún más cuando Kicillof participó en una marcha antifascista convocada por el colectivo LGBTQ+, lo que generó más críticas por parte de Milei. El acto que Kicillof tenía planeado era el primero de varios encuentros políticos previstos para fortalecer su figura a la hora de discutir la estrategia electoral para las próximas elecciones.
Decisión
Sin embargo, la situación actual de inseguridad y la conmoción generada por el fallecimiento de Paredes hicieron que la organización del evento decidiera posponerlo. El ministro de Gobierno, Carlos Bianco, anunció la suspensión a través de sus redes sociales, indicando que el acto sería reprogramado en una fecha futura.
La decisión de Axel Kicillof de suspender el acto ha sido bien recibida por algunos sectores de la comunidad, que consideran que es un gesto de respeto hacia las familias de las víctimas y una muestra de empatía en un momento de dolor. Sin embargo, otros sectores han criticado la medida, argumentando que Kicillof debería haberse enfocado más en tomar medidas concretas para mejorar la seguridad en la provincia.
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