Luego de casi dos años de amor y algunas vueltas, Zaira Nara y Facundo Pieres terminaron su relación. Los viajes de ambos, que muchas veces los obligaba a pasar mucho tiempo separados, los distintos proyectos de vida y un polémico pedido del polista que Zaira no estaba dispuesta a acceder fueron, según contaron, detonantes de la decisión.
Y en las últimas horas, la modelo decidió dejar atrás su postura hermética sobre su separación de Pieres y rompió el silencio. En un ámbito de total confianza, la morocha se abrió en un mano a mano con sus compañeros de Rumis, el programa de La Casa Streaming.
“¿Cómo estás del corazón? Porque hay muchos rumores de que seguías o no con Facu…”, disparó Lizardo Ponce, sin vueltas, en una comunicación con videollamada con Zaira, quien se encuentra de viaje en un destino paradisíaco de Colombia trabajando en una producción de moda y generando contenido para el canal de streaming.
“La verdad…eh….”, dijo Zaira, tocándose el pelo, en un claro gesto de incomodidad que ella misma blanqueó. “Se ponía nerviosa…”, acotó, con una sonrisa para aliviar la tensión. Y completó: “No sé, no estoy en un momento como para hablar de mi vida privada, pero estoy bien”.
EL HUMILLANTE APODO DE ZAIRA NARA
A días de salir a la luz que la relación de Zaira Nara y Facundo Pieres había llegado a su fin, en Intrusos revelaron un chimento que da cuenta de lo mal recibida que fue la modelo en el aristocrático mundillo del polo, donde los escándalos de la hermana de la morocha eran muy mal vistos.
“Anoche, Tartu dijo que la familia de Pieres le decía a Zaira Nara ‘la bataclana’”, contó Adrián Pallares. Para comprender el tenor de ese apodo, la Real Academia Española define bataclana como “bailarina de espectáculo teatral frívolo” y también como “prostituta”.