Este sábado, el secretario municipal de Desarrollo Humano y Familia, Ángel Rivas, y la subsecretaria Julieta Miranda, visitaron el comedor “Mi Lugar”, donde se interiorizaron acerca de las necesidades y demandas de este importante espacio comunitario, que funciona gracias a la labor de un grupo de vecinos del barrio Abel Amaya y a la solidaridad de los comodorenses que donan alimentos e indumentaria. Además de asistir cada sábado a 49 familias con viandas, sus referentes desarrollan diferentes actividades recreativas destinadas a las infancias.
Al respecto, Ángel Rivas manifestó: “venimos acompañando este tipo de espacios comunitarios porque son muy importantes para nosotros, ya que llevan adelante una labor enorme en favor de quienes más lo necesitan. Estos lugares cuentan con el apoyo de la Municipalidad, de forma directa o indirecta, por lo que es fundamental visitarlos y escuchar sus necesidades”.
En esa línea, sostuvo: “este sábado es muy especial porque, además de cocinar y preparar 150 viandas como hacen cada semana, los voluntarios de ‘Mi Lugar’ realizaron una limpieza de los sectores contiguos al espacio, para hacer más cómoda la espera de las familias que vienen a retirar alimentos o indumentaria”.
Para cerrar, el funcionario recalcó: “Comodoro, sin lugar a dudas, es una ciudad pujante y fuerte, pero sobre todas las cosas, y lo sabemos muy bien, es solidaria y su gente tiene un gran corazón, lo que queda demostrado en estos casos”.
Trabajar por quienes más lo necesitan
La presidenta de la Asociación Civil Comedor “Mi Lugar”, Marion Pérez, indicó que el espacio comenzó a funcionar en el año 2018, “preparando la merienda para los niños del barrio, pero con el tiempo fue creciendo, al punto que, durante la pandemia, llegamos a entregar 500 viandas diarias. Actualmente, preparamos 150 viandas para 49 familias, incluyendo más de 70 chicos”.
“Nosotros acompañamos a las familias aportando un granito de arena para cambiarles un poco las condiciones, tanto desde lo alimenticio como con actividades recreativas. Tenemos el apoyo tanto de la Secretaría de Desarrollo Humano como de la comunidad y de distintas empresas e instituciones; la gente es muy solidaria y con sus donaciones nos ayudan a sostener todo esto”, resaltó.
Informó que el comedor funciona los sábados de 9: a 14, “pero a veces nos llegan más alimentos y avisamos a las familias para que pasen a retirar”, a la vez que solicitó a los vecinos “que nos visiten y observen cómo trabajamos y hacia dónde van las donaciones que recibimos”.